sábado, 27 de febrero de 2016

Material

Empeñada como estoy en ir a  lo mio, miro a mi alrededor y estoy ojo avizor a cuanto me rodea.
Todo me inspira. A veces me ocurre yendo en tren y mirando por la ventana. Veo obras maestras en las piedras que tapizan entre los raíles de las vias. Sus tonos grises me fascinan y ese aspecto áspero, agresivo de sus cantos afilados. Las imagino en un lienzo colgado de una pared, llamando al espectador que camina por la sala.
Tal vez me llamará la atención la tierra a los lados, mientras circulamos a toda velocidad. Quizá el óxido que viste formando sinuosas lineas o grandes manchas las paredes de hormigón o las vallas metálicas que aparecen de vez en cuando en el trayecto que me lleva al trabajo.
El bosque, con sus árboles caidos, salpica algunos tramos del viaje ¡Lástima de ventanas cerradas que impiden la entrada del olor a tierra húmeda, a hojas secas o viento mañanero!

 

 
Mis paseos urbanos pueden ser interminables si he de pararme a mirar cuando algo me atrae; si ese edificio en ruinas me llama o la pared se empeña en llamar mi atención con su textura.
Sólo de pensarlo, la sangre impulsa con más fuerza mi corazón. Es la fuerza de lo material; de lo que entra por los ojos y después de ser procesado por el cerebro, se traduce en mil ideas, convirtiéndose en montones de proyectos por hacer.


Por mi trabajo, siempre estoy rodeada de papeles, cartones, pinturas y cientos de cosas que guardan dentro de sí todo un potencial creativo. Por ellas mismas no son nada, tienes que mirártelas con cariño y un interés malsano. Si, si, los dos sentimientos pueden ir juntos.

Estoy enamorada de las cosas que veo, de lo que despiertan en mi corazón y en mi cerebro. Donde unos ven un sencillo pedazo de cartón yo imagino un tesoro. Seguro que te suena la frase de un gran maestro que explicaba que trabajaba con sus herramientas la piedra para liberar la escultura que estaba encerrada dentro.
Me intriga y quiero saber si tú sientes lo mismo. 
Yo siempre digo que si hay algo que a mí me gusta, no creo que sea la única.
¿Y tú qué opinas?

 

3 comentarios:

  1. Pues yo soy como tú, Mercè, me gusta inmortalizar lo que a mí me parece bonito: una pared, un suelo, da igual... Tus fotos me gustan porque transmiten.
    Un beso fuerte y feliz semana,
    Anne.

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  2. Creo que nos llevaremos bien , porque compartimos un mismo sentimiento por las cosas cotidianas que tienen esa transformación en algo bello.

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  3. Creo que nos llevaremos bien , porque compartimos un mismo sentimiento por las cosas cotidianas que tienen esa transformación en algo bello.

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